Trinidad
Arche Plaza y la Fundación
del Cerro.
En este apartado se analiza la Fundación, su organización y la vinculación de Trinidad a la misma entre 1930 y 1934.
1. La Fundación del Cerro. Historia.
Se trata de una obra social poco conocida en la actualidad, que tuvo lugar antes de la Guerra Civil, en un momento en que las clases obreras tenían muchos problemas económicos para acceder a la educación y no había escuelas gratuitas para párvulos.
La Fundación Cesáreo del Cerro fue creada gracias al legado del empresario del ramo de la zapatería Cesáreo del Cerro. Este personaje era un industrial con una fábrica y tienda de cueros en Madrid, muy inquieto, ya que escribió un libro sobre la higiene del pie y fundó una revista profesional que tuvo una larga existencia, hasta cuarenta años.
Siempre se distinguió por sus excelentes relaciones con los obreros, pero nunca tuvo contactos con los socialistas; era liberal y católico. No se saben las razones íntimas que le llevaron a tomar la iniciativa que dejó plasmada en su testamento, aunque estaba en consonancia con su carácter conciliador y filantrópico, algo muy poco común entre el empresariado español de finales del siglo XIX. Así pues, al morir en 1915, Cesáreo del Cerro legó a la Casa del Pueblo de la capital de España gran parte de sus propiedades y bienes: casi setecientas mil pesetas en acciones y un inmueble en la calle de Carranza. Los socialistas crearon en 1916 la Fundación Cesáreo del Cerro para gestionar su legado testamentario. El empresario había dejado expresado que sus bienes debían destinarse a crear una escuela primaria para los hijos de los obreros de las Sociedades de la Casa del Pueblo de Madrid, dejando total libertad en relación con el ideario y forma de enseñar, así como la conveniencia, si se estimase oportuno, de crear pensiones o una especie de becas para los obreros que se destacasen por su inteligencia y laboriosidad para que pudieran aprender y mejorar su formación. El legador encomendaba a Pablo Iglesias el cuidado de su legado. El reconocimiento oficial de la Fundación creada se retrasó mucho tiempo. Hasta 1922 no se pudieron superar las trabas administrativas que los gobiernos conservadores fueron poniendo, y con la publicación de una Real Orden de 31 de enero por la que clasificaba a la Fundación como benéfico docente, pudo ya ponerse en marcha el proyecto. Pablo Iglesias pensó que el mejor administrador de esta institución debía ser Julián Besteiro, que fue nombrado Presidente del Patronato.
En octubre de 1924 en el Notario D. José Menéndez se firma la escritura de compra del terreno para la construcción de la escuela-parvulario de la Fundación del Cerro. En la hoja 3 firma D. Julián Besteiro
En el mes de febrero de 1924 se compró una finca en la finca de la Vereda de Postas, en lo que hoy sería la zona de Azca, en la calle de Orense de la capital madrileña. Por fin, el primero de julio de 1928 se inauguró el edificio, la Escuela Fundacional Cesáreo del Cerro. Los planos de la institución eran de Bernardo Giner de los Ríos. Se trataba de un complejo de 22.000 metros cuadrados Constaba con aulas, biblioteca y otras dependencias educativas, como jardín de infancia. Desde el punto de vista arquitectónico se puede considerar ya propia del funcionalismo que hacía gala su autor, que llegó a ser considerado el “arquitecto de los colegios”. Se aplicaron los principios pedagógicos e higienistas de los años veinte y treinta, es decir, techos altos, importancia de la iluminación por luz solar, ventilación directa y grandes espacios diáfanos.
El edificio para clases
La inauguración de la Fundación.
La inauguración de esta obra tuvo una gran transcendencia, con delegados socialistas de varios países en la misma, pues se trataba de una iniciativa pionera en Europa. Hay que tener en cuenta que en aquella época no había instituciones educativas para hijos de obreros necesitados en casi ninguna parte de Europa.
El personal para atender a la escuela, se seleccionó por el Patronato de manera que no fuese funcionario. Su composición era:
Directora: Dª Carmen García Moreno que procedía de escuelas para niños necesitados y conocía ampliamente la problemática de las mismas.
Profesora: Srta. Mangada (fallecida en noviembre de 1930 y sustituida por Trinidad Arche)
Auxiliar: Dª Juana Sanabria (celadora).
Cocinera: Dª Catalina Osuna.
Limpiadora: Dª Basilia Carrasco.
Colaboraban desinteresadamente un médico (Dr. García Iglesias) y 4 jornaleros, a tiempo parcial.
Todo el personal estaba afiliado a UGT.
Se conserva algún acta de las reuniones del Patronato de la Fundación, a las que acudía Besteiro como Presidente, Vicepresidente era Santiago Pérez y Secretario el Sr. Lois. Pablo Iglesias, ya enfermo, tenía también contacto con ellos, pues era la Fundación un tema de su interés.
Hubo en todos los cursos 18 o 20 párvulos entre 3 y 7 años, siempre existiendo igual número de niños que de niñas. Al llegar a los 8 años pasaban al colegio Jaime Vera.
La administración de la Fundación fue excelente, pues los gastos corrientes se pagaban de las rentas del edificio de la calle de Carranza y de los ingresos de la explotación agropecuaria de la finca, en la forma que había establecido D. Cesáreo, por lo que siempre hubo superávit.
El comedor
El personal para atender a la escuela, se seleccionó por el Patronato de manera que no fuese funcionario. Su composición era:
Directora: Dª Carmen García Moreno que procedía de escuelas para niños necesitados y conocía ampliamente la problemática de las mismas.
Profesora: Srta. Mangada (fallecida en noviembre de 1930 y sustituida por Trinidad Arche)
Auxiliar: Dª Juana Sanabria (celadora).
Cocinera: Dª Catalina Osuna.
Limpiadora: Dª Basilia Carrasco.
Colaboraban desinteresadamente un médico (Dr. García Iglesias) y 4 jornaleros, a tiempo parcial.
Todo el personal estaba afiliado a UGT.
Se conserva algún acta de las reuniones del Patronato de la Fundación, a las que acudía Besteiro como Presidente, Vicepresidente era Santiago Pérez y Secretario el Sr. Lois. Pablo Iglesias, ya enfermo, tenía también contacto con ellos, pues era la Fundación un tema de su interés.
Carta de Pablo Iglesias a Besteiro sobre la Fundación.
Plano de la Finca en la que estaba la Fundación.
Hubo en todos los cursos 18 o 20 párvulos entre 3 y 7 años, siempre existiendo igual número de niños que de niñas. Al llegar a los 8 años pasaban al colegio Jaime Vera.
La administración de la Fundación fue excelente, pues los gastos corrientes se pagaban de las rentas del edificio de la calle de Carranza y de los ingresos de la explotación agropecuaria de la finca, en la forma que había establecido D. Cesáreo, por lo que siempre hubo superávit.
2. El trabajo de Trinidad en la Fundación.
Trinidad Arche terminó sus estudios de Magisterio con Matrícula de Honor en junio de 1.930. Por su buen expediente, al morir la anterior maestra Sra. Mangada, fue contratada, por el Patronato dela Fundación del Cerro, en
diciembre de este año para sustituirla, cuando tenía solo 18 años. Probablemente era afiliada a UGT. Seguramente la esposa de Besteiro que había sido profesora suya en la Normal, recomendó que diesen la plaza a Trinidad por su magnífico historial. Ella siguió
preparando las oposiciones a Maestro Nacional, que serían a finales de 1.933
Trinidad Arche terminó sus estudios de Magisterio con Matrícula de Honor en junio de 1.930. Por su buen expediente, al morir la anterior maestra Sra. Mangada, fue contratada, por el Patronato de
Este trabajo le gustaba
mucho, pues la forma de enseñar se ajustaba a la línea ideológica de la ILE , a la que ella
pedagógicamente estuvo vinculada hasta 1.939. El sueldo no llegaba a cien
pesetas mensuales. Debía de hacer un largo recorrido para la época al ir desde
Tirso de Molina, donde vivía a Cuatro Caminos, en el metro y bajar andando hasta la calle de
Orense, entonces prácticamente el campo.
Entraba
hacia las 9 de la mañana, desayunaba con los niños y daba las clases, empezando
por comentar el tiempo meteorológico, luego la Lengua y Matemáticas. Comía
con los niños y después les daba o bien dibujo o bien Ciencias Naturales, apoyándose
en la gran cantidad de árboles y plantas que había en la finca. Había también animales y los niños veían vacas, gallinas y burros, que se utilizaban para explotar la finca.
La
finca de la Fundación
estaba en lo que luego fue AZCA, cuando aquello era campo y el Canalillo
discurría por la zona cercana a la actual avenida del General Perón.
Trinidad en clase al aire libre, con los párvulos
Trinidad en clase al aire libre y en el aula.
Con los miembros del Patronato (con Besteiro y Llopis. la directora y el médico)
Se dedicaba con gran entrega a este trabajo que era para ella muy gratificante. Siempre le gustó trabajar con párvulos.
Las tardes y noches las dedicaba a preparar la oposición, como cursillista.
Aprobada
la oposición con el número dos de Madrid, es inmediatamente reclamada para el Colegio
Cervantes, que dirigía D. Ángel Llorca, una persona formada en los ideales de
ILE y perteneciente a la misma, dedicado en cuerpo y alma al trabajo docente.
Por ello en diciembre de 1.934 deja el trabajo en la Fundación, con mucha pena pues estaba totalmente integrada en ella. D.
Ella
siempre recordó a Dª Carmen, la directora y a aquellos niños de clase muy
humilde, con deseos de aprender en los cuales volcó sus energías e ideales
juveniles. Fue el lugar en el que se formó en la escuela real y práctica y donde aplicó el
ideario de la ILE ,
del que ya tenía los conocimientos teóricos por la Escuela
Normal. De D. Julián Besteiro siempre habló muy bien, como hombre educado, culto, honesto y preocupado por los problemas sociales españoles. Dió Besteiro apoyo máximo a la Fundación.
3. TEXTO
DE LOS ARCHIVOS SOCIALISTAS
La fundación socialista (PSOE), tiene unos textos sobre este tema, que se pueden consultar:
La fundación socialista (PSOE), tiene unos textos sobre este tema, que se pueden consultar:
4. Un proyecto educativo-cultural socialista: La Fundación del Cerro. Francisco de Luis Martín. Universidad de Salamanca.
http://revistas.usal.es/index.php/0212-0267/article/download/6820/6806
5. La fundación en la prensa de la época.
Esta insólita iniciativa tuvo su reflejo en la prensa de aquel tiempo. Hemos recopilado tres artículos que son muy ilustrativos (La Libertad, El Imparcial y Tiempos Nuevos).
